Fadri - Ser superhéroe es peligroso. No es un trabajo al que te puedas llevar al hijo en el día de "Visita a tu padre en el trabajo".
Y... pues eso... Que no se puede apuntar a tu equipo de superhéroes el primero que pase por la calle.

Kalitro - Normalmente lo de llevarte a tu hija al trabajo sale mal.

Con neurotoxinas y eso.

Pero aunque los superhéroes tengan un escudo narrativo que les impide morir mucho tiempo, no es muy normal que se presente al puesto un niño sin perspectiva de lo que ocurre. Puede acabar MAL.

John_Wheel - En la ficción no es raro ver que los personajes menores de edad tienen psiques bastante adultas, sea para realizar metáforas o paralelismos de otras cosas o porque sería complicado desarrollar la historia si al protagonista sólo le interesa meterse lápices por la nariz y tiene una comprensión muy limitada del mundo. Pero una cosa es que Calvin hable de filosofía de vez en cuando y otra que un crío sin más haga cosas para las que los marines entrenan durante años.

Willy_Galleta - ¿Os he contado ya que Batman está como una puta cabra? Batman está como una puta cabra.
Cualquier premisa puede ser válida para un cómic de fantasía como son los de superhéroes, pero recuerda que cuanto más absurdo e inverosímil sea lo que pasa en tu historia, más difícil será que tus lectores se identifiquen con la historia. Más ajena será.
Como siempre, la salvación a este problema son los factores humorísticos y los impresionantes. Si es gracioso o es impresionante importa menos si tiene sentido.
Pero procurad que primero tenga ALGO de sentido. Si no, la gente deseará que vuestros personajes mueran horriblemente, como le pasó a Robin muchos años.