John_Wheel - El personaje por defecto de algo es un hombre blanco de entre veinte y treinta años. Como consecuencia al pensar en un personaje femenino hay que andar con cuidado para que tenga la dosis adecuada de personalidad, no sea un cliché, no pueda parecer sexista, no dependa de ningún otro personaje del reparto, etcétera, etcétera. Es un mundo muy triste al que se llega si hay que hacer el idiota al diseñar un personaje dependiendo de si se sienta o no para mear. Si vas a hacer un personaje femenino, simplemente piensa en ella como una persona, y ya está. Aunque eso puede ser un problema en caso de tener opiniones pobres de las mujeres, claro.

Salir fuera es un consejo habitual para inspirarse y aprender, y no es una excepción en el caso de los personajes. Conociendo gente se aprende que de todo hay en la viña del señor y que la personalidad de nadie se reduce a "es hermano de" o "tiene músculos". Si un personaje es una abstracción translúcida de una persona, un personaje basado sólo en conocimientos de personajes es bastante más delgado y transparente.

Kalitro - Es terrible ver cómo el hecho de comerse a su madre ha hecho de Hijo de Autor un misógino sin saberlo.

Recordad, aquel sueño fue totalmente canon.

Fadri - Hacer un personaje femenino viene a ser lo mismo que hacer uno masculino, solo que se acuesta con lo contrario.
Menos si es lesbiana, que entonces el personaje masculino tiene que ser gay.
También pueden ser pansexuales, que se acuestan con lo contrario que los asexuales.

Además, en esta tira también descubrimos que si haces mucho zoom a dos rayas, llega un momento en el que se vuelven elipses.

Willy_Galleta - El problema de hacer un mal personaje, sea por la forma sexista o por otra cosa, no es que alguien se ofenda por ello. Siempre se va a ofender alguien por algo.
El quid reside en que lo que cuentas de un personaje a través de la narración se corresponde por defecto con lo que observas tú como autor en ese personaje. Si no estableces primero un contexto para disociar tu identidad de autor de la del narrador que presenta al personaje la gente va asumir que tu modo de ver las cosas es el de ese narrador. Y si estás contando una versión de la historia bajo un prisma misógino despreciable, pues te tomarán por alguien misógino y despreciable.
Otra cosa es que seas alguien misógino y no te hayas dado cuenta aún. Es bastante fácil hoy día buscar en Internet cómo saber si lo eres y en qué grado. Hay muchos sitios con información y ejemplos de cosas bien y mal hechas. Si haces personajes ofensivos para la raza humana, o bien no has investigado lo necesario, o bien eres una persona horrible. Procurad no ser personas horribles. Hacedlo por los niños del futuro.